Diez años para impulsar la Agricultura Familiar

Existe un cierto debate a la hora de definir la Agricultura Familiar, pero no de reconocer su importancia y las desigualdades que sufre. Tal es así que la comunidad internacional está llevando a cabo un plan de diez años para impulsarla.

La Agricultura Familiar es el modelo de producción que vincula las explotaciones agrarias a las familias. Así, el peso de la planificación, gestión y trabajo de cada explotación recae en los integrantes de una familia.

Esta organización de la producción nació con la propia agricultura y desde entonces viene dando respuesta a los retos de la humanidad. Es tan intrínseca al desarrollo de todas las civilizaciones que quizá por eso existen confusiones a la hora de delimitarla.

Los principales desconciertos están relacionados con el destino de los productos generados por este modelo y por la mano de obra empleada en él. Por eso, muchas personas no conocen distinciones entre Agricultura Familiar y de subsistencia. Obvian, incluso, que las explotaciones familiares también crean empleo en sus comunidades proporcionando trabajo fuera de la familia, especialmente en momentos como la cosecha.

¿Y la silvicultura? Sí, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) también incluye la silvicultura, el pastoreo, la pesca y la acuicultura dentro de este término. Las cifras aportadas por la ONU describen un conjunto monumental. Estos son algunos de los datos:

• Más del 90% de las explotaciones agrícolas del mundo son familiares. En ellas se produce más del 80% de los alimentos.
• El 90% de los pescadores son pequeños productores, de los cuales más del 90% vive en países de desarrollo en los que son responsables del 50% de las capturas.
• Se calcula que hay 200 millones de pastores y 500 millones de trashumantes y nómadas, pero la cifra real podría multiplicar varias veces estas cifras.

En todo caso, uno de las mejores definiciones para comprender este modelo es autoría del académico español Tomás García Azcárate: “La Agricultura Familiar es aquella en la que las decisiones se toman en torno a la mesa de la cocina y no alrededor de la mesa del consejo de administración”.

Sostenibilidad de la Agricultura Familiar

La Agricultura Familiar es la forma de producción agraria más sostenible. Puesto que el tamaño de las explotaciones tiene una relación directa con el de las familias, este modelo contribuye a hacer un uso y reparto equilibrados de los recursos económicos y naturales entre todos los eslabones de la sociedad.

Su sostenibilidad ambiental, económica y social son la respuesta a grandes retos globales actuales: el cambio climático y el deterioro de los recursos naturales, el hambre y el reparto de la riqueza, la homogeneización cultural y la congestión demográfica en grandes núcleos.

Precisamente sobre esto último España es uno de los países más afectados en nuestro continente. Nuestro país cuenta con amplias zonas que tienen menos habitantes por kilómetro cuadrado que Laponia. La preocupación por la despoblación del medio rural desembocó en 2020 en la inclusión de su lucha en el Ministerio para la Transición Energética y el Reto Demográfico.

Amenazas a la Agricultura Familiar

A pesar de los grandes números que respaldan la Agricultura Familiar, ésta tiene importantes amenazas a su liderazgo en un corto plazo y, con ello, la carrera hacia los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenibles).

La agricultura recibe el impacto negativo directo de la contaminación de resto de sectores. Los productores familiares son especialmente sensibles a las consecuencias del cambio climático y constituyen un importante colectivo de las y los migrantes climáticos.

Por otra parte, las grandes empresas que operan en el resto de eslabones de la cadena alimentaria, empresas industriales y de distribución, oprimen los precios que reciben las y los productores familiares.

Las grandes corporaciones agrarias también tienen un impacto negativo. Como ya hemos visto, las explotaciones agrícolas familiares producen más del 80% de los alimentos. Pero esto no quiere decir que ocupen la mayor parte de las tierras de cultivo del planeta, ni mucho menos. El 1% de las explotaciones de mayor tamaño ocupa el 70% de la tierra de cultivo según la ONU.

Además, del total de tierras agrícolas las mujeres solo poseen el 15%; esto a pesar de que son casi el 50% de la mano de obra agrícola. Esta desigualdad contribuye a la notable migración de las mujeres del medio rural hacia el urbano. Se produce entonces una progresiva masculinización del medio rural que repercute en el envejecimiento de las comunidades rurales y en el despoblamiento de las áreas que ocupan.

El Decenio de la Agricultura Familiar

La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó 2019-2028 el Decenio de la Agricultura Familiar, un esfuerzo inmenso por impulsar este modelo de producción clave en la lucha por conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS).

Para lograr los objetivos del Decenio, contamos con el Plan de acción mundial. Éste estructura en siete pilares las medidas que propone, las cuales van desde el ámbito global hasta el local.

• Pilar 1: Crear un entorno político propicio para fortalecer la Agricultura Familiar

• Pilar 2: Apoyar a los jóvenes y asegurar la sostenibilidad generacional de la Agricultura Familiar Pilar 3: Promover la equidad de género en la Agricultura Familiar y el papel de liderazgo de las mujeres rurales

• Pilar 4: Fortalecer las organizaciones de los agricultores familiares y su capacidad para generar conocimiento, representar a sus miembros y prestar servicios inclusivos en el continuo urbano-rural

• Pilar 5: Mejorar la inclusión socioeconómica, la resiliencia y el bienestar de los agricultores familiares y los hogares y comunidades rurales

• Pilar 6: Promover la sostenibilidad de la Agricultura Familiar para conseguir sistemas alimentarios resilientes al cambio climático

• Pilar 7: Fortalecer la multidimensionalidad de la Agricultura Familiar para lograr innovaciones sociales que contribuyan al desarrollo territorial y a sistemas alimentarios que salvaguarden la biodiversidad, el medio ambiente y la cultura.

Para supervisar el seguimiento de este plan en cada país se constituyeron entidades específicas. En España, el Comité nacional de la Agricultura viene trabajando desde octubre de 2010. A él pertenecen diversas organizaciones y personalidades expertas, entre las que está la organización de mujeres rurales FADEMUR.

¿Cómo puedes apoyar la Agricultura Familiar?

La mejor manera de ayudar a las explotaciones familiares es consumir sus productos. Si los compras directamente a las productoras y productores, te aseguras que reciben un precio justo por su trabajo. De esta forma, podrán seguir realizando su importante labor.

La compra-venta directa a las y los productores por parte del público suele llamarse canales cortos de distribución. Los canales cortos no deben confundirse con el consumo de proximidad, también muy beneficioso ambientalmente por la reducción de huella de carbono que supone.

Combinar el consumo de proximidad con el de canales cortos de explotaciones familiares garantiza el máximo impacto positivo de tu alimentación. Y este, precisamente, es el origen de La Plataforma Verde, la herramienta para el encuentro de personas consumidoras y productoras que saben que un planeta mejor está al alcance de nuestra mano.